Talento Inútil Nº 99*****
El amor como forma de arte reiterativo, mañana-tarde-noche muero deseando tocar tu piel (una idea de los demás cursi al parecer para “algunos”, pero los “algunos” no me importan, esos “algunos” que descubren mas real lo que se refleja que el reflejo mismo…), por que este errático ser que aporrea las teclas cual bongos tropicales no encuentra las palabras suficientes para satisfacer tu inquietud arraigada por saber si te amo, “por que lo preguntas?” te pregunto (me pregunto vaya que es cierto…!), me respondes que necesitas saberlo cierto…
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Fin de la inspiración, caducidad en latas de “mis ideas ya no me convencen”, retiro precipitado a la tumba de los “ya-merito” de esos que quisieron tanto & no sabian con que objeto; élla dice que baila salsa con “algunos” mas que arrítmicos si bastante tímidos, yo mientras tanto me conduzco por calles de nombres desconocidos en espera del Lobo que saldrá de entre las Sombras a saciar su hambre, la Srta. Que camina a mi lado (que no es mi novia…) se define como Paola, la conductora perfecta para un malogrado submarino polar; ríe de a veces, sonoriza el silencio de la noche; solo queremos dormir, perdernos entre sabanas & almohadas de camas maltendidas (Manual de Carreño fuck yeah..!) con la esperanza de descubrir que el final no es lo que nos contaron esta noche…
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…Entonces Chuck afino su guitarra Gibson (R.I.P.) & me deseo feliz cumpleaños…; antes de que yo pudiera decir media palabra me sorajo un exquisito monologo que si intentara repetirlo textualmente realmente seria imposible, son de esos momentos que se quedan guardados en nuestra infinita memoria, que pasan los días, los meses & los años, & aunque no lo sabemos siempre permanecerán ahí…
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